(Día 96)
La Paz.- No tengo ganas de escribir, ni de hablar. Ni de pensar, ni de leer, ni de dormir, ni de jugar, ni de pasear, ni de comprar, ni de responder mails, ni nada.
Realmente, desde la semana pasada, todo parece girar entorno a las ganas. A las pocas ganas de que este país avance, a las pocas ganas de dialogar, a las pocas ganas de comer.
Y ahora que parece que todo el mundo puede volver a comer, presidente incluído, va y soy yo el que no tiene ganas de nada.
Aunque tendré que comer un poco.
La Paz.- No tengo ganas de escribir, ni de hablar. Ni de pensar, ni de leer, ni de dormir, ni de jugar, ni de pasear, ni de comprar, ni de responder mails, ni nada.
Realmente, desde la semana pasada, todo parece girar entorno a las ganas. A las pocas ganas de que este país avance, a las pocas ganas de dialogar, a las pocas ganas de comer.
Y ahora que parece que todo el mundo puede volver a comer, presidente incluído, va y soy yo el que no tiene ganas de nada.
Aunque tendré que comer un poco.
Lost in my self - Australian Blonde
1 comentario:
menja home, que si no estaràs tan prim com jo!
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